Un plan de manejo implementado por el Parque Nacional Campos del Tuyú junto a la FAUBA y la Fundación Vida Silvestre mejoró la oferta de alimentos en la zona, para ayudar a conservar esta especie nativa en riesgo de extinción.
Aún en áreas agrícolas existe una red de vegetación natural conectada que funciona como hábitat de polinizadores, con muchos beneficios. Investigadores avanzan en el conocimiento de estos espacios.
Un estudio de la FAUBA demuestra cómo ciertas ideas ampliamente aceptadas no serían válidas en ecosistemas muy áridos. Advierten sobre los riesgos de realizar grandes generalizaciones sin el sustento experimental adecuado.
A partir de un proyecto de extensión de la UBA, horticultores de Berazategui desarrollan controladores biológicos junto a docentes y estudiantes para disminuir el uso de químicos.
Un proyecto que permite llevar energía eléctrica a un pueblo bonaerense a partir del biogás producido con el estiércol de las vacas, recibió un nuevo impulso. Ya inyectan 200 kilowatts al día a la red eléctrica y avanzan en una nueva obra, con tecnologías innovadoras.
Desarrollan un método que aumenta hasta 10% la exactitud de las evaluaciones genéticas en animales jóvenes, superando los estándares internacionales. Reclaman políticas regulatorias.
Una iniciativa de productores, técnicos, docentes, investigadores y estudiantes fue distinguida por la UBA: Producen verduras desde la agroecología y las venden de manera directa al consumidor.
Mientras la mayoría de estos campos maneja altas cargas de ovinos, según un estudio de la FAUBA el pastoreo moderado aumentaría la producción y la sustentabilidad.
Investigadores de la FAUBA utilizan extractos de plantas accesibles, como palo amargo y ajo, para combatir a los insectos en aquellos sitios donde se acopian granos y semillas.
A partir de la Misión SAOCOM, se desarrollaron 42 proyectos de investigación con universidades y otras instituciones que van a permitir generar nuevas herramientas para los cultivos.