Nuevos satélites argentinos, con servicios para el agro
A partir de la Misión SAOCOM, se desarrollaron 42 proyectos de investigación con universidades y otras instituciones que van a permitir generar nuevas herramientas para los cultivos.
A partir de la Misión SAOCOM, se desarrollaron 42 proyectos de investigación con universidades y otras instituciones que van a permitir generar nuevas herramientas para los cultivos.
¿Cómo deciden qué cultivos siembran en cada campaña? ¿Qué riesgos podrían asumir en los próximos años? ¿Cómo influye el clima y la economía, y cuál es el impacto sobre el ambiente? Algunas respuestas preliminares.
La alta tasa de desmonte en el noroeste del país está íntimamente relacionada con el veloz ascenso de las napas, las inundaciones y la degradación de los suelos. ¿Existe algún manejo sustentable para revertir esta situación?
El Glifotest es un sensor para detectar el herbicida de manera rápida y sencilla en muestras de agua, suelo y alimentos, mediante bacterias modificadas genéticamente.
Un estudio reveló qué sucede con la hojarasca antes de llegar al suelo y entrar en contacto con microorganismos. El papel de la radiación solar y sus implicancias productivas.
Una inquietud de René Favaloro en los ´90 podría hacerse realidad. En Argentina mejoraron técnicas para avanzar en este sentido.
Un proyecto de investigación y transferencia profundiza en el potencial de las algas microscópicas para el agro y la industria, con ventajas que van desde el saneamiento ambiental hasta la generación de compuestos de altísimo valor comercial.
Una herramienta en la web permite conocer qué cantidad de fitosanitarios se puede aplicar a los cultivos sin riesgos de toxicidad. Incluye 3000 productos comerciales y es utilizada gratuitamente por 700 agricultores.
Investigadores de la FAUBA ponen la lupa sobre el uso agrícola de esta nueva herramienta. Quieren conocer con certeza para qué sirve y cuál es su potencialidad. Un adelanto de las primeras investigaciones.
Un estudio determinó las condiciones meteorológicas que favorecen la limpieza de contaminantes atmosféricos en la Ciudad de Buenos Aires. Los resultados permitirán elaborar modelos de computación, evaluar la calidad del aire e implementar medidas de mitigación.