Identifican una bacteria benéfica para el tomate

Las plantas inoculadas con la bacteria Azospirillum resistieron 40% más a una enfermedad que causa daños severos a este cultivo, a otras especies hortícolas y frutales, y a la soja.

ctrl vs inoculado en arrozComo alternativa para suprimir o disminuir el consumo de agroquímicos se propuso usar bioinoculantes a base de bacterias que viven en la zona radical, como Azospirillum brasilense. de reconocido estímulo sobre el crecimiento y desarrollo vegetal. En la foto, la raíz de la derecha, inoculada, muestra un mayor desarrollo que la no inoculada, sobre la izquierda.

(SLT-FAUBA) Un grupo de investigadores de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) determinó por primera vez que el tomate inoculado con Azospirillum brasilense, una bacteria capaz de fijar nitrógeno de la atmósfera, resiste un 40% más que el no inoculado a una de las enfermedades más dañinas para ese cultivo: la podredumbre de la base del tallo y la raíz, causada por el hongo Sclerotium rolfsii. Este problema sanitario también afecta a otras especies hortícolas y frutales, e incluso a la soja, por lo que implementar este bioinoculante permitiría reducir en gran medida el uso de agroquímicos.

integrantes laboratorio ribaudo

Claudia Ribaudo (segunda desde la derecha) junto a los integrantes de su laboratorio. El inoculante para tomate, a base de Azospirillum brasilense, podría llegar a escala comercial en el futuro.

“Nuestros ensayos en tomate muestran que la bacteria Azospirillum brasilense, al ser aplicada como bioinoculante, controla razonablemente bien la infección que causa el hongo Sclerotium rolfsii y favorece el crecimiento de la planta. Nuestros resultados son alentadores ya que las plantas inoculadas tuvieron un índice de mortalidad 40% menor que las plantas control sin la bacteria”, comentó Claudia Ribaudo, profesora adjunta de la cátedra de Bioquímica de la FAUBA.

La investigadora añadió que “Si bien ya existen inoculantes comerciales a base de Azospirillum brasilense —incluso en asociación con Pseudomonas, una bacteria que solubiliza un nutriente clave como el fósforo del suelo—, nosotros estamos en tratativas con una empresa de inoculantes para desarrollar un producto nuevo que mejorará a las formulaciones existentes”.

inóculo y hongos patógenos en tomate

Como bioinoculante de tomate, Azospirillum brasilense mejora la resistencia de las plantas a ciertas enfermedades fúngicas, además de mejorar su estado nutricional.

Gracias al impulso de estos resultados, Ribaudo y su grupo ampliaron sus líneas de investigación relacionadas con la sanidad de los cultivos. “Estamos comenzando estudios sobre el efecto controlador de Azospirillum sobre los hongos patógenos Cercospora arachidicola y Ramularia collo-cygni. Cercospora afecta al cultivo de maní y Ramularia causa daños en cebada, cerca de la floración. En ambos casos, las recomendaciones usuales de manejo se basan en aplicar agroquímicos, y esto nos preocupa”.

 

Los bioinoculantes y sus múltiples efectos

Ribaudo propuso el uso de Azospirillum y otros microorganismos como una alternativa para reducir el uso de agroquímicos, mejorar la nutrición y el rendimiento de las plantas y controlar enfermedades: “Es una bacteria benéfica. Puede vivir en casi todos los suelos del planeta, en asociación con las raíces. Como tiene capacidad para ‘captar’ nitrógeno de la atmósfera y transferírselo a la planta hospedante, promueve el crecimiento y el desarrollo vegetal. Este es el propósito con el que se desarrollan los bioinoculantes”.

azospirillum

Vista al microscopio electrónico de Azospirillum brasilense sobre una raíz. Esta bacteria tiene la capacidad de fijar nitrógeno de la atmósfera y brindárselo al cultivo.

Azospirillum está presente en la mayoría de los inoculantes biológicos que se usan comercialmente en cultivos como trigo, maíz, arroz y hortícolas. Puesto que la agricultura hoy por hoy se apoya en el uso indiscriminado de agroquímicos, y dado que, como mencioné antes, esta bacteria es capaz de controlar enfermedades, creemos que la adopción de esta tecnología permitiría reducir o hasta eliminar, en ciertos casos, su uso”, sostuvo Claudia Ribaudo.

La bacteria Azospirillum no es la única que se emplea en la formulación de bioinoculantes. Al respecto, la investigadora de la FAUBA aclaró que no todas las bacterias ‘benéficas’ se comportan igual forma ni tienen las mismas capacidades. “Algunas son buenas fijadoras de nitrógeno; otras no, pero se destacan como solubilizadoras de fósforo, como biocontroladoras de enfermedades o como productoras de hormonas”.

“Sin embargo, también se debe considerar que introducir estas bacterias en los agrosistemas podría modificar el ambiente original donde se encuentran los microorganismos autóctonos. Dado que el uso de inoculantes se extiende cada vez más, de cara al futuro se deberán estudiar los diferentes impactos sobre las comunidades microbianas del suelo, sobre cómo cambiarían sus interacciones y cómo afectaría esto a la vegetación”, alertó Claudia.

Arroz a la Azospirillum

“El arroz es un cultivo básico para la alimentación en América Latina. Iniciamos los estudios en arroz en el año 2003, y en todo este tiempo, el cultivo creció hasta alcanzar actualmente las 235.590 hectáreas sembradas y una producción de casi 1,6 millones de toneladas. Esto nos ubica como octavo exportador mundial de este cereal”, contó la docente.

¿Qué es un bioinoculante?
Es un producto cuyo principio activo es un microorganismo vivo y que se le aplica a las plantas para favorecer su nutrición o crecimiento —precisó Claudia Ribaudo—. No debe ser patógeno ni para las personas ni para los animales o las plantas, ni tampoco puede contener microbios patógenos oportunistas del ser humano. El desarrollo de este tipo de inoculantes comprende una etapa inicial de investigación básica para aislar los microorganismos, caracterizarlos y seleccionarlos en base a experimentos en invernáculo y a campo. La siguiente etapa es escalar la producción para la industria. En la actualidad, el Ministerio de Agroindustria apuesta fuerte al desarrollo este tipo de productos, de alto valor agregado.

Ribaudo y su grupo de investigación en la FAUBA trabajan con el arroz como objeto de estudio porque se conoce su genoma y porque existe una demanda creciente de parte de la cadena arrocera para aumentar la eficiencia y los rendimientos. Con sus experimentos profundizaron en el conocimiento de las relaciones entre las plantas y las bacterias promotoras del crecimiento, con la mirada puesta tanto en los bioinoculantes como en generar conocimiento básico.

En este sentido, explicó: “Nos enfocamos en responder qué sucede a nivel bioquímico-molecular en la planta ni bien entra en contacto con la bacteria. El trabajo que publicamos en enero junto a José Curá y María Cantore —investigadores de la FAUBA— en la revista World Journal of Microbiology and Biotechnology, muestra por primera vez en el mundo la vía metabólica por la cual la inoculación con Azospirillum brasilense estimula el crecimiento de las plantas de arroz”.

cultivo de arroz

Como país exportador, la Argentina alcanzó 23 destinos en el último año, incluyendo mercados muy interesantes como México y Colombia. Foto: lapachotv.com.ar

“Por el momento, nuestros resultados son a escala de laboratorio. Sin embargo, otros investigadores ya informaron que, en condiciones de campo, las plantas de arroz inoculadas aumentaron un 12% la cantidad de nitrógeno derivado de la fijación biológica, y que su rendimiento fue un 7,5% superior al de las plantas sin inocular. Todos estos resultados nos permiten seguir pensando en soluciones productivas que no dañen el ambiente”, concluyó Ribaudo.

Acerca del autor

Pablo Roset
Ingeniero Agrónomo, MSc. en Recursos Naturales (UBA), escritor y músico.

7 Comments on "Identifican una bacteria benéfica para el tomate"

  1. Que GRAN novedad!!! La asociación simbiótica trigo- Azospirilum con respuesta en Nitrógeno fuera conocida!Con fósforo: Abre una puerta BUENÍSIMA!

  2. Buenos dias. Bastante interesante el informe, lo que interesaria saber si ya se probo el bioinoculante en tomates y en que zona del pais y si se adapta a cualquier tipo de clima y suelo. Y un monton de preguntas mas sobre el comportamiento de la planta con la aplicacion de esta bacteria. Agradeceria su respuesta. Me llamo josé y soy un pequeño productor de tomates en Mar del Plata.

  3. Se os ha dado el caso de que les sale a los tomates unas raicillas internas que suelen llegar desde el pedúnculo hasta la placenta? Otro problema es la caída en el sabor de los tomates; os dejo mi correo que es: ags.aguila@gmail.com

  4. aldo ezequilla ramirez | 22 septiembre, 2019 at 2:53 pm | Responder

    hola que tal me intereso la investigación sobre esta bacteria inoculado al tomate con Azospirillum brasilense y algo novedoso ya que no veo en latinoamerica este tema , quisiera saber si tienen un paper para saber mas sobre su investigación , soy alumno de la UNIVERSIDAD DE PERU “SAN LUIS GONZAGA DE ICA” de la FACULTAD DE BIOLOGIA, y no se si fuera tanta la molestia que me pasaran su paper, mi correo aldoezequillaramirez@hotmail.com, gracias

  5. Preocupa la relacion con microorganismos autoctonos,a estudiar!

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